Albert Ludwing Berblinger nació en 1770. Fue educado para ser sastre, pero a él lo que le gustaba era inventar. Se entretenía realizando pequeños artilugios como por ejemplo miembros ortopédicos.

El sastre anunció que volaría en público para que todo el mundo lo viera. Casualmente se anunció en Ulm la visita del rey de Wütemberg, Federico I ¡Se podía pedir algo tan espectacular como un vuelo! Por ello, Berblinger aplazó la promesa de la cita hasta que el rey llegara. Y lo haría además saltando desde una plataforma a cierta altura, situada a la orilla del Danubio, para conseguir sobrevolar el río hasta la otra orilla.
Y llegó el día y saltó el sastre... pero las condiciones no eran tan favorables como en su primer intento y cayó al agua. La vergüenza fue tal, que el sastre se marchó de Ulm para no volver.
(+) Más histórica y con un final diferente...
Por cierto, una gran sorpresa... un poema de Bertolt Brecht (que además es el que Fabio nos leyó en nuestro tour por Ulm) escrito en honor al sastre, aquí en alemán y aquí en español:
El sastre de Ulm (1592)
-¡Obispo, puedo volar!
-le dijo el sastre al obispo-.
¡Fíjate, voy a probar!
-Y con algo como alas
el sastre subió al lugar
más alto de la catedral.
Pero el obispo no quiso mirar-.
-Como el hombre no es un ave,
eso es pura falsedad
-dijo el obispo del sastre-.
Nadie volará jamás.
-El sastre ha muerto -la gente
al obispo fue a informar-.
Fue una locura. Sus alas
se tenían que desarmar.
Y ahora yace destrozado
sobre la plaza de la catedral.
-¡Que repiquen las campanas!
Era pura falsedad.
¡Como el hombre no es un ave
-dijo el obispo a la gente-,
nunca el hombre volará!
-le dijo el sastre al obispo-.
¡Fíjate, voy a probar!
-Y con algo como alas
el sastre subió al lugar
más alto de la catedral.
Pero el obispo no quiso mirar-.
-Como el hombre no es un ave,
eso es pura falsedad
-dijo el obispo del sastre-.
Nadie volará jamás.
-El sastre ha muerto -la gente
al obispo fue a informar-.
Fue una locura. Sus alas
se tenían que desarmar.
Y ahora yace destrozado
sobre la plaza de la catedral.
-¡Que repiquen las campanas!
Era pura falsedad.
¡Como el hombre no es un ave
-dijo el obispo a la gente-,
nunca el hombre volará!
3 comentarios:
es el primer poema que leo en aleman...y no esta tan mal del todo (hasta se entiende!!!!!)
podrias abrir una seccion en tu blog para poemas y frases echas o refranes en alemán...
ya sabes: Wenn die Krahe niedrig fliegt....
Pues el señor Sastre de Ulm tiene un peli y todo!
Amiga!!! Nunca olvidare ese dia!! Gracias por este pedacito de tu blog! Nos divertimos bastante no..? Creo que conseguire trabajo como guia turistico en Ulm y vuelvo... que te parece??
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